Por: Lynda Guzmán.
Han pasado algunos años, desde que nos despidiéramos de una de las mejores series de fantasía, Juego de Tronos, tanto sus personajes como el sinfín de alianzas, traiciones y venganzas nos conquistaron. Ahora HBO nos trae parte de la historia de la familia Targaryen, casi 200 años antes de los acontecimientos de la serie original.
La Casa del Dragón, por lo tanto, estará centrada básicamente en la familia Targaryen, quienes reinan Poniente en una etapa de prosperidad y paz, la cual se ve seriamente comprometida gracias a que el rey Viserys I Targaryen no tiene un heredero, por lo que se verá obligado a decidir si su heredero será su hermano Daemon Targaryen (Matt Smith) o su única hija Rhaenyra Targaryen.
Rhaenyra, interpretada en su versión joven por Milly Alcock, es una adolescente inteligente y amable a quien no le interesa reinar, pero sí montar a su dragón y pasar el tiempo con su mejor amiga Aliscent Hightower, por su parte Daemon, es un hombre violento nada dispuesto al trabajo pero sí muy interesado en obtener el trono de hierro o eso es lo que vemos en un principio, porque como en Juego de Tronos, veremos que no hay buenos ni malos, todos juegan en un zona gris dependiendo de las necesidades del momento.
Para empezar me sorprendió que Viserys I, es un hombre que ama a su familia, reina con justicia y sobriedad, talvez por los antecedentes con el Rey Loco, se tenía la creencia que los Targaryen eran por lo menos reyes estrafalarios y arrogantes, pero hasta este punto de la historia pareciera ser todo lo contrario.
Quién a todas luces se ve que no es una persona de fiarse es La Mano del Rey, Otto Hightower, presiento que la conspiración que se ve venir inicia con Hightower, más que con Daemon, como quieren hacer creer al rey.
A este punto de la historia hemos visto algunas referencias con Juego de Tronos, como los emblemas de las casas, la mención del guardián de Winterfel y de la familia Baratheon, pero no esperemos mucho más, por lo que esta serie puede ser vista muy fácilmente si necesidad de conocer los acontecimientos de Juego de Tronos.
Respecto del cast no se puede pedir más, todos están espectaculares en sus personajes, Rhys Ifans, como Otto Hightower es excepcional, Matt Smith le da a Daemon una dimensión estupenda, veremos grandes cosas de su personaje, pero sobre todo la joven Rhaenyra, lo hace magníficamente, tiene ese toque dulce pero fuerte, que hace que inmediatamente empatices con ella.
Con el autor de los libros, George R. R. Martin, involucrado por completo en la serie, ya que la escribió en su mayoría, creo que podemos estar tranquilos, este primer episodio tenía las expectativas muy altas y las cumplió con crecer. Un dato importante es que Miguel Sapochnik, recordado por dirigir episodios de Juego de tronos como “La batalla de los bastardos”, dirige el episodio piloto de La casa del dragón, por lo que se asegura calidad narrativa.
En el apartado de efectos visuales, no hay queja, los dragones se ven muy bien (de los cuales veremos hasta 17 de ellos) talvez si nos ponemos muy quisquillosos podemos ver algo que no cuadra muy bien en tomas áreas de la ciudad, pero no es nada que te saque de la historia.
Hasta el 23 de octubre tendremos un capítulo semanal, para debatir conspiraciones, muertes y teorías, por el momento La Casa del Dragón, no puedo iniciar mejor.