Hemos tenido la oportunidad de ver “Napoleon”, fuimos testigos de un impresionante viaje a la Francia del siglo XIX bajo la dirección de Ridley Scott. Con una duración de 158 minutos, la película nos lleva a través de los orígenes y la ascensión meteórica de Napoleón Bonaparte al trono imperial.
Joaquin Phoenix lidera un elenco estelar con su interpretación magistral del emperador francés, destacando la notable química que comparte con Vanessa Kirby, quien personifica de manera conmovedora a Josefina de Beauharnais. La relación adictiva y volátil entre los protagonistas se convierte en un eje emocional que enriquece la trama.
La etiqueta de “épica” se ajusta a la perfección a la película, gracias a sus escenas de batalla impactantes y a una producción de época meticulosa que sumerge a los espectadores en la Francia napoleónica. Los efectos visuales, especialmente al representar las antiguas ciudades, contribuyen a la autenticidad visual de la obra.
La fuerza actoral de Phoenix y Kirby es evidente, con intervenciones en pantalla que cautivan y dan vida a los matices de sus personajes. Ridley Scott, conocido por su habilidad en narrativas épicas, presenta los momentos cruciales de la vida de Napoleón con maestría, ofreciendo una visión interpretativa de la historia.
En nuestra opinión hay un par de escenas que podrían haberse omitido sin afectar la esencia de la trama. Sin embargo, esto no ha disminuido el impacto general de la película, que se posiciona como uno de los estrenos destacados del año, casi una obra de arte.
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